Existen varios medicamentos que se usan para disminuir las recaídas y la inflamación de las fibras nerviosas, como
interferón beta-1b,
interferón beta-1a,
acetato de glatiramer,
mitoxantrona,
metotrexato y
natalizumab.
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También hay varios medicamentos que se usan para el dolor, calambres, cansancio, depresión, disfunción sexual, problemas intestinales y urinarios. Las infecciones febriles pueden empeorar la enfermedad. Durante el embarazo no se puede usar medicación pero luego después del parto se debe hacer tratamiento para mejorar los síntomas porque la enfermedad se empeora.
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Es importante hacer exámenes neurológicos y de la audición para seguir la progresión de la enfermedad exámenes de resonancias magnética del cerebro y de la médula espinal para monitorear actividad de la enfermedad.
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El tratamiento de las formas progresivas debe ser individualizado en función de la progresión de la enfermedad, así como la preferencia del paciente y del médico. Las recomendaciones de la Academia Americana de Neurología son:
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Esclerosis múltiple secundaria progresiva: Solo se ha conseguido poca mejora. El tratamiento es hecho con:
- Pulsos mensuales de glucocorticoides dentro de la vena (intravenosos) (1.000 mg de metilprednisolona) que lleva solo a una mejora a corto plazo pero no mejora a largo plazo
- Ciclofosfamida intravenosa y los pulsos mensuales de glucocorticoides: Mejora a corto plazo pero no cambia el curso de la enfermedad.
- Metotrexato oral o subcutáneo, 7,5 a 20 mg por semana, con o sin pulsos de glucocorticoides mensuales: Se necesitan más estudios pero parece que mejora el curso de la enfermedad.
- Interferones: Principalmente cuando haya recaídas
Esclerosis múltiple primaria progresiva: No hay un medicamento que realmente cambie el curso de la enfermedad. Se pueden usar los pulsos mensuales de glucocorticoides mensuales, el metotrexato, oral o subcutánea, 7,5 a 20 mg por semana, con o sin pulsos glucocorticoides mensuales. Otros medicamentos que se usan son la
cladribina y la mitoxantrona.
Esclerosis múltiple recurrente-remitente: Se recomienda comenzar el tratamiento con uno de los siguientes medicamentos modificadores de la enfermedad:
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- Interferón beta-1a, 30 mcg. una vez a la semana
- Interferón beta-1a inyectado en el musculo o debajo de la piel (subcutáneo) 22 o 44 mcg tres veces a la semana
- Interferon beta-1a pegilado 125 mg una vez cada dos semanas
- Interferón beta-1b subcutáneo, 0,25 mg (1 ml) cada dos días
- Acetato de glatiramer subcutáneo, 20 mg al día
- Natalizumab intravenosa, 300 mg de infusión más de una hora cada cuatro semanas
- Dimetilfumarato en cápsulas de liberación retardada, 120 mg dos veces al día durante una semana, y luego 240 mg dos veces al día
- Teriflunomida oral, 7 o 14 mg comprimidos una vez al día
El tratamiento debe ser individualizado en cada caso y evaluando si hay mejora de los síntomas con exámenes médicos y con los exámenes de imagen.
Otros medicamentos que pueden ser usados son:
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- Azatioprina
- Angioplastia venosa y colocación de un pequeño tubo de malla de alambre en la vena recién abierta para ayudarla a quedarse abierta (stent venoso) para tratar casos en que hay insuficiencia cerebroespinal crónica (que afecta las venas que drenan el sistema nervioso central)
- Cladribine, que puede mejorar un poco la enfermedad pero tiene muchos efectos secundarios
- Ciclofosfamida
- Daclizumab
- Dalfampridine
- Glucocorticoides
- Metotrexato
- Immunoglobulina intravenosa
- Laquinimod
- Rituximab
- Ocrelizumab
- Trasplante de células madre del propio paciente.